Triángulo RVTres condiciones para el crecimiento efectivo

Una de las principales conclusiones del libro “Emprendedores en crecimiento: el reto de la financiación” se refiere a la importancia que tiene lograr la presencia de tres factores necesarios: La mentalidad emprendedora, la financiación inteligente y el desarrollo de modelos de negocio innovadores. Son tres pilares que deben estar presentes al mismo tiempo, pues si uno de ellos falta, el crecimiento emprendedor encontrará grandes limitaciones.

Mentalidad emprendedora

La mentalidad emprendedora no se refiere únicamente a la capacidad del emprendedor para identificar y perseguir oportunidades, sino también al hábito que tienen algunos emprendedores de revisar de manera consciente la forma como sus modelos de pensamiento se están ajustando a la realidad en cada momento.

Esta idea de mentalidad emprendedora se relaciona con la “mentalidad de crecimiento” (growth mindset) identificada por la psicóloga Carol Dweck. Ella ha demostrado que las personas que entienden los retos como oportunidades para aprender, tienen mayores posibilidades de éxito. Su proceso incluye la posibilidad de equivocarse y revisar los modelos de pensamiento utilizados en el pasado.   Esta manera de enfrentar las nuevas situaciones es opuesta a la llamada “mentalidad fija” (fixed mindset), donde el individuo tiene la creencia de que ya es un conocedor del tema en cuestión y, por ende, considera que un reto que aparece en el camino implica siempre la posibilidad de quedar mal evaluado por quienes observan.  Esto lleva a las personas a abstenerse de experimentar y asomarse a lo desconocido, por temor a fracaso y a las consecuencias reputacionales que este conlleva. Al dejar de experimentar frente a lo nuevo, dejan de aprender.

Otro concepto relacionado es el de “alerta emprendedora”, que se refiere a la capacidad que tienen algunas personas para identificar condiciones de cambio y desequilibrio en una situación y entender también cuál es el modelo mental que deben utilizar para aprovechar esta situación  como una oportunidad. La “alerta empresarial” lleva a la persona a adoptar nuevos modelos de pensamiento si cree que son pertinentes para enfrentar la situación nueva, incluso cuando estos modelos contradicen otros esquemas mentales utilizados en el pasado.

En suma, las personas que tienen una verdadera mentalidad emprendedora son capaces de experimentar con lo nuevo, aceptan que pueden incurrir en errores en el proceso y también saben que deben estar abiertos a adoptar nuevas maneras de pensar. En este proceso, no tienen problema en cuestionar o contradecir modelos mentales que han utilizado con éxito en el pasado.

En el tema de la financiación, en particular, la adopción de esta mentalidad emprendedora tiene una importancia extraordinaria. Puesto que los encuentros de los emprendedores nacientes con los financiadores e inversionistas suelen ser frustrantes, algunos emprendedores desarrollan modelos mentales que les llevan a rechazar a los actores de financiación a partir de allí, incluso cuando pasa el tiempo y sus empresas crecen. Estos emprendedores suelen construir explicaciones del mundo en las cuales los actores de financiación son dañinos e indeseables, de manera coherente con el modelo mental desarrollado a partir de las experiencias negativas en las etapas iniciales de la empresa. Sin embargo, el hecho de aferrarse a esas ideas tiene como consecuencia que sus empresas no logran crecer más allá de un límite.

Financiación inteligente

Desde la perspectiva del ecosistema, no basta con que se desarrolle la mentalidad emprendedora. También es necesario que esté presente la financiación inteligente. Este último término se refiere a la existencia de actores de financiación que entienden que sus aportes a los emprendimientos no pueden limitarse al dinero, sino que el rol de inversionista implica un compromiso con el desarrollo del emprendedor  y la empresa, que implica aportar conocimiento y conexiones en el mundo de los negocios.

Esto implica que quien aporta financiación inteligente está dispuesto a esforzarse por entender en profundidad al emprendedor y a asumir riesgos altos en los emprendimientos. En Colombia son pocos los inversionistas que reúnen estas características. Sin embargo, existen ya ejemplos de inversionistas que han tomado este camino, con un impacto evidente sobre la marcha de los emprendimientos en los que invierten.

El desarrollo de la financiación inteligente es un problema del ecosistema y no solamente de los individuos. El aprendizaje sobre las características de los emprendedores dinámicos, las trayectorias típicas de las empresas y la solución a los problemas y barreras que pueden aparecer en el camino, no se da en forma eficiente si los individuos trabajan en forma aislada. Es necesario reforzar los mecanismos ce creación de comunidad que ya existen en los ecosistemas de emprendimiento de las ciudades, con el fin de permitir que esas comunidades crezcan y el aprendizaje sobre la experiencia común se vuelva productivo.

Modelos de negocio innovadores

“Emprendedores en crecimiento” identificó también que los emprendimientos de mayor crecimiento son liderados por individuos que se preocupan por entender todas las dimensiones del negocio y por generar innovación en los modelos de negocio. Este tipo de innovación implica entender en detalle la configuración de actividades que permite lograr diferenciación y ventaja en el planteamiento de una propuesta de valor al mercado, para introducir nuevas formas de entregar esta propuesta de valor.

En otras palabras, estos emprendedores no piensan únicamente en el producto o en la tecnología, sino que entienden a fondo las conexiones entre los distintos aspectos del negocio. Saben encontrar ventajas frente a los competidores al ensayar soluciones nuevas en el manejo de canales, en los recursos y tecnologías, en las condiciones que determinan el ciclo de efectivo, en la construcción de alianzas o en otros aspectos de la empresa. No es indispensable que cada uno de estos elementos sea particularmente innovador en sí mismo, si su articulación en un modelo de negocio permite generar valor y diferenciación y si la combinación es difícil de replicar por otros competidores. Los emprendedores dinámicos más exitosos se caracterizan porque se mantienen permanentemente en la búsqueda de estas combinaciones nuevas en los componentes de sus modelos de negocio.

Estos tres elementos son necesarios para el crecimiento. La mentalidad emprendedora no llega lejos si no se encuentra con la financiación inteligente para desarrollar modelos de negocio innovadores. La financiación inteligente no se puede desarrollar si no hay en el panorama individuos con mentalidad emprendedora. Las configuraciones innovadoras de modelo de negocio no surgen si no hay mentalidad emprendedora y no crecen si no hay financiación inteligente. El desarrollo simultáneo de estos tres componentes debe estar en lugar prioritario en la agenda de todos los ecosistemas de emprendimiento.